Tribunal de menores (Juvenile Justice) es una serie surcoreana y original de Netflix que se estrenó el 25 de febrero del 2022 y que abarca un tema controversial y engorroso sobre la delincuencia juvenil. Creado por Hong Jong-Chang y Kim Min-suk, y protagonizado por Kim Hye-soo, Kim Moo-yeol, Lee Sung-min y Lee Jung-eun.

Tiene diez capítulos en los que aparecen casos de extrema gravedad, como prostitución grupal, asesinatos, violación, estafa, maltrato, entre otros, que van llamando la atención de la audiencia y que al final no escapan de la triste realidad del mundo en el que vivímos.

La história gira en torno a Shim Eun‑Seok (Kim Hye-soo), una jueza con carácter frío que aborrece a los delincuentes juveniles, porque según ella, no cambian su manera de ser y de actuar.

Se convierte en jueza recién nombrada de un tribunal de menores en el distrito de Yeonhwa y tiene una gran trayectoria en otros juzgados con fama de sentenciar con dureza a los delincuentes.

Estando en el tribubal de menores rompe las costumbres y establece sus propios métodos para castigar a los transgresores de acuerdo al marco de ley.

Cada caso lo maneja de manera exhaustiva, hasta el punto de salirse del margen de sus responsabilidades, buscando siempre la verdad y pruebas necesarias para así dictar los fallos correspondientes lo mejor posible, sin perder su imparcialidad y su toque implacable hacia los infractores.

Para lograr la neutralidad al momento de juzgar, tiene que lidiar y equilibrar su desprecio por los delicuentes juveniles con sus creencias firmes sobre la justicia y el castigo, mientras aborda los casos complejos que tiene sobre la mesa.

Ella trabaja codo a codo con otro Juéz llamado Cha Tae -Ju (Kim Moo-yeol), un hombre con una mente más abierta y que cree fervientemente que los menores sí pueden cambiar su estilo de vida, si se les trata con bondad. Centra toda su atención en entender el modus operandis de los jóvenes y las razones que éstos tienen al momento de delinquir. Lucha por ayudarlos a regenerarse y a reinsertarlos como mejores ciudadanos a la sociedad, también trata en lo posible que Shim Eun‑Seok desarrolle empatía en cada caso que debe precidir.

Por encima de ellos tienen al Juez Kang Won-Jung (Lee Sung-min) quien de joven era un juez justo y con un corazón bondadoso, que no dejaba que entes ajenos al tribunal le manipularan en los fallos que dictaminó. Lleva un registro de todos los casos que precidió en los veintidos (22) años que sirvió como juez, e incluso conserva reflexiones escritas de cómo podía mejorar y reformar la ley de menores en pro del bienestar de los mismos.

Sin embargo, llega una propuesta política que le da la oportunidad de llegar a ser un legislador y así cumplir su sueño de promulgar la ley soñada, pero en el proceso, su ecuanimidad se ve nublada por su ambición y trunca las investigaciones de la jueza Eun-Seok para que no haya ningún escándalo que opaque su candidatura.

En algunos casos tuvo razón en oponerse a Eun-Seok ya que ella cruzaba la línea y trajo consecuencias graves al tribunal de menores, pero, hubo otras ocasiones que su oposición le llegó a costar su puesto de trabajo ya que su familia estaba involucrada. Actuó de manera negligente, a tal punto que abusó de su autoridad con tal de que su reputación no estuviera manchada y así continuar con su carrera política.

A pesar de que Shim Eun‑Seok tenga un carácter despreciable, poco amigable y no muestre empatía, tiene un gran sentido de la justicia, lo que ayuda al Juez kang Wong-Jung a volver a sus cabales y asumir la responsabilidad de sus actos.

En los últimos capítulos se une al tribunal de menores la Jueza Na Geun-Hee (Lee Jung-eun), quien es más estricta que su predecesor Kang Wong-Jung, ella impone a sus subordinados agilizar los trámites de los casos ya que hay demasiados sin resolver. Más adelante se muestra cómo ella está ligada a un suceso grave, que no recuerda, y que pasó hace 5 años, e involucra a Shim Eun-Seok y a su familia. Dicho suceso nos ayuda a entender más la personalidad de Shim Eun-Seok y el por qué destesta a los delincuentes juveniles.

En este drama no hay escenas románticas ni comedia, pero, plantea muchas cuestiones éticas sobre la justicia, no tiene un tono sutil sino bastante fuerte desde el comienzo que engancha a la audiencia y nos muestra el peso de responsabilidad que tienen los jueces sobre sus hombros al momento de juzgar a un menor de edad, y que puede traer consecuencias nefastas si no se hacen las investigaciones pertinentes tanto para las víctimas y sus familiares como para el menor que se juzga.

Importante destacar, que el drama emite un mensaje a la audiencia que no escapa de la realidad, mostrando cómo los menores de edad que llegan a delinquir por lo general, vienen de familias inestables y de un entorno emocional poco propicio que se puede conseguir fácilmente en las escuelas, entitades públicas, sus hogares, progenitores, familiares cercanos, entre otros, donde hay abusos y una serie de hechos que terminan por corromper la mente de un menor.

También se destaca el sacrificio que hacen algunas personas de manera voluntaria para reformar a estos jóvenes con ayuda del Tribunal, y el sufrimiento que dicho sacrificio les puede acaecer tanto a ellos como a sus familias inmediatas.

Un drama interesante que lo recomiendo para todos aquellos que les gusta este tipo de programas y que les llama la atención el tema judicial ☺

Gracias queridos lectores por leer mis artículos ☺

Por Crismar de Segnini

Hola queridos lectores, soy una venezolana que se graduó en Lic. en Gerencia de Recursos humanos, bilingue, músico y cantante. Amante de los dramas asiáticos y sobre todo soy esposa y madre de dos maravillosas niñas de las que me siento muy orgullosa y afortunada😊😍

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